Viendo los comentarios a las últimas entradas compruebo con horror que todavía hay mucha gente que no vota porque dice no creer en la democracia o que está muy desilusionado con los políticos.
Respetando sus creencias y sus desilusiones, el problema está en no entender la importancia del voto en la organización de los Estados y que la única forma de gobierno en el siglo XXI, admitido por todos los países civilizados, es la democracia.
Ejercitar el derecho al voto responsablemente exige ponderar las consecuencias, y pensar muy bien a quien das tu voto. No dejarse engañar por las promesas electorales de quienes buscan su propio bien, en vez del bien común; de los que les preocupa mucho que no ganen los otros, vaya que lo hagan bien, nos bajen los impuestos, nos suban las pensiones, construyan carreteras, etc., y dejen mal a los que con tanta avidez política nos han engañado tantas veces.
sic.
Hace 52 minutos
No votar tambien es una opción, entiendo que es el voto de castigo. Yo voto, pero casi siempre a disgusto
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